La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) ha emitido una alerta sanitaria dirigida a la población sobre la empresa LATINMEX, S.A., debido a su incumplimiento de regulaciones sanitarias y la falta de licencia sanitaria para llevar a cabo sus actividades.
Según lo establecido en los artículos 198 y 258 de la Ley General de Salud, los establecimientos dedicados a la fabricación de medicamentos deben contar con una licencia sanitaria expedida por la Secretaría de Salud, además de cumplir con los estándares de calidad y seguridad establecidos.
LATINMEX, S.A. ha sido identificada por COFEPRIS por fabricar y/o comercializar productos sin registro sanitario, lo que representa un riesgo para la salud del consumidor al no contar con estudios científicos que respalden su calidad, seguridad y eficacia.
Entre los productos de LATINMEX, S.A. se ha identificado DEPODROXO 12 70,000, una solución inyectable que contiene hidroxocobalamina, cianocobalamina, tiamina y lidocaína. Este producto ostenta un registro sanitario (71825 SSA IV) que no fue expedido por la autoridad sanitaria, lo que genera incertidumbre sobre su contenido y condiciones de fabricación.
Ante esta situación, COFEPRIS hace las siguientes recomendaciones:
A la población:
- No adquirir productos de la empresa LATINMEX, S.A. y en caso de tener información sobre su comercialización, realizar una denuncia sanitaria a través de los canales correspondientes.
- Suspender el uso de productos de LATINMEX, S.A. y contactar a un profesional de la salud para continuar con el tratamiento médico adecuado en caso de haberlos utilizado.
- Reportar cualquier reacción adversa o malestar relacionado con estos productos al correo electrónico: farmacovigilancia@cofepris.gob.mx.
A distribuidores y farmacias:
- Adquirir productos que cuenten con registro sanitario y obtener productos de establecimientos que posean licencia sanitaria y aviso de funcionamiento.
El DEPODROXO 12 70,000 es un fármaco utilizado para tratar diversas afecciones neurológicas, y su uso incorrecto o la falta de control de calidad pueden representar riesgos para la salud de los pacientes.
